07 agosto, 2008

Los girasoles ciegos


Confieso que ha sido un libro que me ha sorprendido gratamente. Lo descubrí por casualidad, perdido en la biblioteca de una buena amiga, mientras husmeaba entre sus estantes en busca de algo que leer.
Del libro lo primero que me llamó la atención fué lo delgado que era. Estaba buscando un libro que fuera fácil de transportar para leer en los ratos muertos que tengo mientras me desplazo a mi trabajo y éste cumplía ese objetivo.

Cuando leí su argumento y que había obtenido los premios de la Crítica y Nacional de Narrativa, me animé a leerlo.

Los girasoles ciegos es un libro de cuentos en el que a lo largo de cuatro historias entrelazadas entre sí, y que tienen como fondo común la guerra civil española, el autor nos habla de seres vencidos; personajes a los que el azar los puso en el sitio equivocado en el momento equivocado y ésto hará que irremediablemente su existencia esté marcada por un trágico final.

En el primer relato, o primera derrota, el autor nos habla del capitán Alegría. Oficial del ejército fascista, Carlos Alegría se rinde a los republicanos cuando las tropas golpistas están entrando en Madrid. Postura que, lógicamente, no es entendida por ninguno de los dos bandos, pero que el oficial explica que toma, entre otras muchas razones aparentemente arbitrarias, porque sus correligionarios no querían ganar la guerra, sino matar al enemigo. Su entrega le acallará la mala conciencia de haber sido miembro de un ejército que, para vencer, ha tenido que cometer tantas atrocidades y crímenes Como dice Ramón Pedregal a propósito de una reseña sobre el libro: “El capitán Alegría es un Bartleby que cuestiona la norma de aquellos con los que vive y no puede abandonar su visión de lo que ocurre”.

La segunda derrota, quizá el relato más logrado y sobrecogedor de los cuatro, nos cuenta el breve periplo de un joven poeta que huye de los vencedores hacia las montañas asturianas en compañía de su mujer embarazada. En medio de la soledad y el frío la muchacha da a luz a un niño y muere tras el parto. A través de un diario íntimo, donde el adolescente deja escrito su miedo, se nos va poniendo en antecedentes de la vana lucha que emprende el joven padre para salvar la vida de su hijo.

El tercer relato, o tercera derrota, gira alrededor del soldado republicano Juan Serna. Cuando el presidente del tribunal que debe juzgarle y su mujer se enteran de que el soldado enemigo conoció y vio morir a su hijo (un ser abyecto que fue fusilado por sus múltiples delitos) le conminan a que hable y hable sobre ese hijo. Intentando arañar unos días más a la existencia, convierte al joven traidor en el héroe que quieren los padres. Mas la impostura pronto le asquea y cuenta la verdad. Verdad que indefectiblemente le llevará a la muerte.

La historia, o la cuarta derrota, que cierra el libro transcurre en la opresiva vida cotidiana del nuevo régimen. En ella se habla de Ricardo, un “topo” al que toda la familia protege entre miedos y silencios. Desde el armario en el que vive encerrado contempla impotente y horrorizado el acoso libinidoso que sufre su mujer por parte de un diácono, profesor del hijo del matrimonio. El final es dramático y desolador.

1 Internautas dijeron....:

supersalvajuan dijo...

A mí me encanto. Y la historia del cura... Bendito sea el dulcísimo nombre del Creador. Esperemos que la peli esté a la altura.