Esta receta se elabora con un buen gallo de corral. Si no tienes ninguno a mano se puede sustituir por un pollo de granja.
Para 4 personas necesitamos:
1 pollo de un kilo y medio
1 cebolla gorda
4 ajos pelados
50 grm. de almendras peladas
3 hojitas de laurel
50 grm. de pan candeal
1 ramita de perejil
1 vasito de cuarto litro de vino añejo
1 litro de caldo de ave.
Aceite y sal
La forma de prepararlo es muy sencilla:
Troceamos el pollo en ocho trozos y lo salamos.
Ponemos una sartén al fuego con bastante aceite. Cuando esté caliente echamos los trozos de pollo durante un par de minutos, el necesario para que se cierren los poros de la carne y quede jugosa por dentro.
Retiramos las piezas de la sartén y las reservamos.
Picamos la cebolla en brunoise y los ajos. Echamos primero la cebolla a la sartén y luego los ajos.
Añadimos las almendras.
Añadimos el pan candeal cortado en dados para que se fria.
Echamos las hojas de laurel y el perejil picado.
Cuando todo esté medio pochado, añadimos el vasito de vino y flambeamos ligeramente.
Por último añadimos el caldo de ave y dejamos que hierva por espacio de cinco minutos.
Retiramos la sartén del fuego, y echamos su contenido en el vaso de la batidora y lo trituramos.
En una olla se ponen los trozos de carne de pollo frita, lo cubrimos con el batido que hemos preparado y rectificamos de sal.
Dejamos que hierva por espacio de dos horas o dos horas y media (en el caso de que hayamos conseguido un gallo de corral) o hasta que el pollo esté tierno si lo único que hemos conseguido ha sido un mísero pollo de granja.
Buen provecho
18 abril, 2008
Gallo a la Tordesillana
Etiquetas:
La cocinilla
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