19 marzo, 2008

Los renglones torcidos de dios



Quien lea el primer capítulo de este libro de Torcuato Luca de Tena ya no podrá dejar de leer hasta el final del mismo. El argumento es muy sencillo: Alicia Almenara, detective privada, finge una paranoia para ser admitida voluntariamente en un manicomio y así poder investigar quien ha sido el autor de un asesinato por el cual ha sido contratada.

Alicia tiene una rara, cutivadora e inquietante personalidad y una inteligencia fuera de lo común, que la hace tener respuestas para casi todo.

La lectura del libro nos hace en muchos momentos cuestionarnos si el personaje está realmente paranoico (cuando hablan de ella los doctores) o si realmente se trata de una farsa para descubrir al autor de un crimen (tal y como sostiene el personaje).
El libro, que se hace corto, termina con un inesperado y sorprendente doble final.

Todos los locos encerrados en ese manicomio son "Los renglones torcidos de dios" y sus enfermedades están tratadas con rigor y respeto. Entre ellos podemos destacar al "niño mimético", "el hombre elefante", "la niña oscilante", "el autor de la teoría de los nueve universos" y algunos más.

Para la documentación de este libro el autor se internó voluntariamente en un hospital psiquiatrico del estado,durante dieciocho días, fingiendo una psicosis depresiva profunda sin que nadie supiera que realmente no le pasaba nada (salvo Juan Antonio Vallejo Nagera, psiquiatra y amigo al que el autor pidió ayuda para documentarse y averiguar como ingresar en el hospital psiquiatrico).

Transcribo aquí el prólogo del libro:

Para escribir este libro, el autor -después de visitar numerosos manicomios- ingresó en un hospital psiquiatrico y convivió, como un loco más entre los locos. Casi todos los enfermos mentales cuyos avatares se relatan ( y que en la obra aparecen como "Los renglones torcidos de dios"), han sido conocidos y tratados por el escritor.

Con todo, el autor ha cambiado nombres, sexos, edades y lugares de procedencia. Aquellos que son fruto exclusivo de su invención, son, no obstante, similares a otros clínicamente encuadrados y clasificados, dentro de la gran variedad de perturbaciones de la mente. No obstante, esta obra no es un tratado de psiquiatria. Es novela y solo novela.
El manicomio próximo a Zamora conocido como Hospital Psiquiatrico de Nuestra Señora de la Fuentecilla, instalado en el edificio de una antigua cartuja, no existe en la realidad: es un compendio novelado de otros muchos y su inspiración más próxima es aquel en que voluntariamente ingreso Torcuato Luca de Tena, simulando una psicosis depresiva, para mejor conocer, desde dentro, la pavorosa realidad que pretendia describir.

1 Internautas dijeron....:

Anónimo dijo...

Además con la particularidad de que el autor no abusa de lenguaje técnico y eso hace que la lectura sea muy amena.

Por otro lado, el autor redacta muy bien.