12 diciembre, 2008

Más pobres, 30 años después

A las ocho de la mañana, puntual como un reloj suizo, Luis Úbeda recorría los escasos 30 metros que le separaban del quiosco de periódicos y la panadería. Siempre llevaba el diario Ya, por el que abonaba 8 pesetas. La pistola de pan le costaba nueve. Corría el año de 1978. Treinta años después, Úbeda sigue el mismo guión diario. Pero el periódico le cuesta un euro y el pan, 55 céntimos.

Si ambos precios se expresaran en euros y se aplicara el factor de corrección por la pérdida de poder adquisitivo de la moneda por la inflación, el resultado es que el periódico cuesta tres veces más que en 1978 y la barra de pan vale casi el doble.

Los españoles son más pobres hoy que hace 30 años. Los sueldos son más bajos y el precio de los productos de primera necesidad resultan considerablemente más caros. En 1978, los hogares se enfrentaban con uñas y dientes al inicio de la segunda crisis del petróleo. Descontada la amenaza de la inflación, hoy los datos resultan demoledores. El salario base se ha reducido casi un 10% en términos de moneda constante. La vivienda ha multiplicado su precio por 31.

Estanflación
En el año de la Constitución, el país se hallaba envuelto en una fase de recesión económica combinada con una alta inflación, por el meteórico ascenso del valor del petróleo. Un estancamiento económico, unido a altos precios (estanflación) que condujo a una política de tipos de interés muy elevados para combatir el IPC. El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, había confiado la dura tarea de hacer frente a la crisis a Fernando Abril-Martorell, como vicepresidente segundo y ministro de Economía. Las revisiones salariales superaban el 20% cada año.

Treinta años después, la economía doméstica está en peor situación. Si se realiza un estudio del valor de determinados bienes y servicios en euros y depurado el efecto de la inflación, las cifras reflejan ese empobrecimiento en tres decenios. En 1978, el salario base era de 108 euros y ahora es de 99, siempre considerando precios que depuran el efecto de la inflación. Los bienes de primera necesidad han registrado un encarecimiento brutal. La barra de pan ha pasado de 5,5 céntimos de euros a 9 céntimos. El periódico ha subido de 0,05 a 0,17 euros. El redondeo aplicado con el euro ha encarecido muchos productos hasta un 66%.

Para igualar los precios actuales de los productos hay que dividir el precio actual por 5,72 para obtener precios equivalentes a los de 1978. El cuadro adjunto refleja los precios de 1978 en pesetas y su equivalente en euros, los de 2008 en euros y los mismos tras aplicar la corrección inflacionista de 30 años.

El nuevo escenario de coste y salarios ha determinado la configuración laboral de los hogares. Hace treinta años, apenas trabajaban mujeres. Si lo hacían, necesitaban permiso de los padres o los maridos. Ahora tienen que trabajar ambos cónyuges. Uno solo para pagar el préstamo hipotecario.



Autor: Victor Relaño/Enrique Morales Visto en Negocios.com

La Lupa

La responsabilidad de la vivienda y el euro

Ocho de cada diez españoles es propietario de su casa, una proporción muy por encima del resto de Europa, excepto Hungría y Eslovenia. La vivienda es la clave de la riqueza —también de la pobreza— en España. Que su precio aumente supone un incremento de patrimonio, por contra dedicar hasta el 60% del salario a su compra, como sucede en la actualidad, un riesgo de morosidad y una garantía de no poder llegar a fin de mes, ante cualquier contratiempo como el paro. En épocas de bonanza, periodos entre 1985 a 1992 y de 1996 a 2008, el precio de los inmuebles se dispara, mientras en que épocas de crisis, el principal patrimonio de los españoles pierde valor.

El euro, con un efecto claramente positivo en la economía nacional por la estabilidad que supone frente a la peseta, ha tenido un impacto negativo en los precios y en el poder adquisitivo de los españoles.

De la noche a la mañana, lo que antes costaba 100 pesetas (60 céntimos de euro), paso a costar un euro (166 pesetas). El redondeo ha dejado tocadas a muchas economías domésticas que ya antes de introducción lo tenían difícil para llegar a fin de mes. Los turistas, que venían a España a gastar, por lo barato que resultaba, ahora se marcha a Turquía, Grecia o a los países de Este. España es tan cara como Alemania o Reino Unido.

Dos de cada diez españoles vive ya por debajo del umbral de pobreza relativa. Sin embargo, el porcentaje se reduce al 15,2% si se suma a sus ingresos el valor del uso que hacen de su vivienda son sus propietarios. El ingreso medio de los hogares alcanzó en 2008 los 26.000 euros y tres de cada diez españoles admite que no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos.

0 Internautas dijeron....: